Luz

Quiero ser tu amiga. Ya no importa si me hiciste, te hice, daño. ¿Sabes qué es lo realmente increíble? Que hemos llegado hasta aquí. Y que no nos hemos separado, ni en el rencor. Eso no tiene precio.

Dime, ¿cuántas personas te salen en la lista del para siempre? Ahora tus alegrías, con personas que ni conozco, en sitios donde no he estado, vividas en segundos preciosos de confesiones que ni he escuchado, también son mías.

Antes no. Antes quería ser tu única fuente de felicidad. Tu centro, tu generador en los apagones. Cortocircuito si veía alguna otra luz. Cuando yo, en realidad, ni brillaba.

Aprender a diferenciar qué es lo mejor, para el uno y para el otro, es una ingeniería. Una vez conseguido, a veces, es posible empezar a querer de otra manera. Por esto, y por lo que no digo, quiero ser tu amiga.

2 comentarios en “Luz

Deja un comentario