Cuando te pasan demasiados pensamientos por la cabeza, y se enredan, llega un momento en el que el cerebro entra en hibernación. La cantidad es la misma, pero la velocidad disminuye. Una defensa (supongo). Entonces todo empieza a ir muy despacio, se congelan los problemas, flotan a un ritmo lento y se van desanudando. Coges …
